24.5.07

Grito desgarrador


A pocos días del fin del mundo me pasa lo inimaginable. Todo por culpa de la tecnología China. Yo, como consumidor, confío plenamente en esos chinitos que se ven tan trabajadores, y por eso les compro de todo. No me merezco esto ¡Por qué me va a pasar esta desgracia! A mí, en mi propio cuarto. Justo ahora que comienza la cuenta regresiva para la hecatombe. Justo cuando me había apertrechado con sardinas, atunes, melocotones, palmitos y cualquier vaina enlatada que veía en el supermercado.

Hice un esfuerzo sobrehumano para conseguir armas y así proteger mi estatus de las hordas que seguro vienen a por nosotros. Coño, tan precavido que he sido. Esto no me puede estar pasando a mi ¡Hasta un casco de miliciano tengo! Por si acaso, también hice mi cola y me inscribí en el partido, porque uno nunca sabe. Pero la útima palabra no es mía. El destino me la jugó feo. Me hizo trampa y de la balurda. ¡Oh, dolor!

La cuenta regresiva no para y yo me lo voy a perder todo. Es como si el sueño me hubiera vencido la noche del Y2K. La desgracia comenzó esta tarde cuando llegué a casa después de mi curso avanzado de “prevención de emergencias apocalípticas”. Estaba muy feliz, porque me sabía preparado para enfrentar lo que viniera. Me acosté en la cama y cuando intenté encender el televisor chino que compré en diciembre, el condenado no respondía. No puede ser, me dije. Deben ser las pilas del control. Le di los golpes de rigor al remoto y nada ¿Será que se dañó? ¡No. No puede ser! Sí, sí es. Se dañó. Se quemó, como por combustión espontánea en sus circuitos. Como para restregarme en la cara que no podría presenciar el fin de los tiempos.

Si todo lo que dicen por ahí es cierto, no tendré oportunidad de ver como dinamitan el viaducto, ni los saqueos, ni las vigilias. No podré presenciar los llantos de unos y las risas prepotentes de otros. No hay show para mi este fin de semana. No seré, ni siquiera, uno más en las cifras. No podré formar parte de la sintonía que se vislumbra histórica. El rating se habrá olvidado de mi, así como lo hizo con los p.n.i. mañaneros. ¿Y mi futuro inmediato? ¿De qué hablaré el lunes? ¡Oh, dolor!

Ubicación al escribir esta entrada:
Latitud 10° 30' N, Longitud 66° 50'W


7 comentarios:

hijo dijo...

aprovecho para invitarlos a un espacio reducido (será anunciado en breve) para reunirnos y ver juntos, entre penas y dolores(y alguna risa de labios apretados) el fin de los tiempos tal y como los conocemos.

la hora? nochecita en adelante del domingo 27-05.07

el evento? fin del mundo que conoces

el lugar? por confirmar

los asistentes? los q no salgan con mariqueras y excusas chimbas.


entre "papita, maní y tostón", brindaremos "palo pa los fields". "aflojaa" ese corazón y "volteóse, hermana". que el futuro no nos agarre de espaldas a la pantalla.

contacto: 114 & hijo

Unknown dijo...

Tu si tienes cosas...me he reido un monton¡

Anónimo dijo...

Demasiado bueno tu post, esctibes espectacular mi niño

Anónimo dijo...

Demasiado bueno tu post, escribes espectacular mi niño

Marcos Mendoza Saavedra dijo...

Yo lo que se es que deberíamos presionar a nuestros patronos laborales para que nos diera la quincena el viernes...

Para que el fin del mundo nos agarre buchones...

Anónimo dijo...

OK, YA VAN 4 DÍAS SIN PUBLICAR TEXTOS NUEVOS....


YO SÓLO TE DIGO UNA COSA:

¡SÉ DÓNDE VIVES!



CON MUCHO AMOR Y CARIÑO


La terrorista del flequillo

Anónimo dijo...

5 días....



¡Aumenta la sentencia!