18.12.06

No sé de qué escribir


Hoy, como pocas veces, me siento frente a la computadora sin saber qué demonios voy a escribir. Generalmente, cuando me dispongo a teclear algunas palabras tengo una idea leve de lo que puede salir. Hoy no es así.

Un texto sinsentido, sin orientación, huérfano de toda argumentación lógica, es esto que usted trata de entender en este momento, apreciado lector. En pocas palabras, usted es parte de un experimento antidepresivo de este servidor; aunque también puede tomar este texto como la típica respuesta a un examen de bachillerato, escrito a mano —y en bolígrafo—, en donde se le dan vueltas al asunto interrogado, pero eso sí, siempre el estudiante a ser evaluado hace bulto por todo el folio de papel para hacer ver a su evaluador que se domina una u otra materia, cuando no es así.

Lo cierto es que preocupa a quien les escribe no tener nada que lo impulse a redactar un par de líneas. Nada. Cero. No hay un tema. Hoy no hay pasión. Eso es lo que el chamo del 114 ha decidido llamar desesperanza acumulada, síndrome que le aqueja regularmente, pero que nunca se había manifestado con estos síntomas. Hoy no hay musas, ni anécdotas, ni amigos, ni país caribeño. Hoy usted termina de leer un texto desabrido y yo busco razones para seguir. Touché.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

al menos recomienda un traguito, como en otras oportunidades.
uno te hará link al otro... "un tequilita pa'l pavo, un tequilita pa'l blog".

Anónimo dijo...

Te comprendo perfectamente, hay días que no quisieramos ni mover un solo dedo para escribir. Los que tenemos que ganarnos la vida escribiendo realidades o ficciones comprendemos que la musa se va de vez en cuando y a veces regresa algo jodida y cansada.

Animo ya te saldrá algo.
http://katiuskah.blogspot.com

Anónimo dijo...

Eso pasa, pero pronto saldrá algo que ni lo esperabas

Anónimo dijo...

Eso pasa, pero pronto saldrá algo que ni lo esperabas

Marcos Mendoza Saavedra dijo...

Si te pones a ver, la página en blanco no es del todo fea. Está ahí mirándote, atenta, callada, como la perfecta pareja indecisa y sumisa.No le pares, ya se le pasará. Es culpa de ella.

Bravo por la hoja en blanco

(No la adeca, ojo)

un abrazo

Anónimo dijo...

"atenta, callada, como la perfecta pareja indecisa y sumisa"... Si yo fuera tu novia te catapultara al vacío y me tomaría un martini viéndote caer. Jamás en mi vida me he tomado un martini, pero creeme que aprendería a hacerlo y a tomarlo en honor de tu desbarranco. Años sin leer una vaina tan machista como esta. Como bien dice mi madre "Ser inteligente no es saber matemática".
Con Amor
La Maga

P.D: "Hombre no es gente". como diría mi amiga Mónica Montañez

Anónimo dijo...

Te lo ganaste! Si escribes algo así, y además firmas con tus dos apellidos, mereces una respuesta como la anterior.

Difícil ganarle una a La Maga.

No me queda más que brindar con mi amiga la del martini. Y que vivan las parejas que se hacen felices participándose y compartiéndose.

Ahí mi dosis de cursilería...

Saludos al chamodel114... Uno de los pocos hombres adosados con convicción a la causa feminista del mundo.

Anónimo dijo...

No fue culpa de ella...Creo que tuviste una pareja atenta, callada y sumisa pero no supiste que hacer con ella...Nunca la apreciaste y ella nunca te miró, por eso te aburriste de ella.

En cambio, la hoja del chamodel114 siempre lo ha estado mirando, por eso hoy le rinde homenaje, aunque él no tenga nada que decirle solo nombrarla basta para ella.

Anónimo dijo...

el famoso autor, redundo rotundo, ya bien lo dijo en su autobiografìa de èl mismo:

"esa a quien llamas musa no es más que la fatua jactancia de nuestra engreìda vanidad por alimentarse de, valga la redundancia, alimentos que alimenten nuestro ego propio."

parafraseando al autor, echarle la culpa o darle las gracias a la musa es tan autoindulgente como inutil.

no nos damos cuenta del metamensaje que va màs allà del, valga la redundancia, mensaje. nunca hay nada que decir, siempre se trata de algo, cuando no del todo.

chamindelonehundredandfourteen, aplaudo tu manera tuya, valga la redundancia, de ti de armar alboroto sin que nadie se de cuenta. tu "textico majunche, valga la redundancia, chimbo" es en realidad un sobre bomba que en vez de a uno, nos volò la mano a todos los distraìdos mensajeros ministeriales

lo saluda con cariño, el hijo de sus padres que, valga la redundancia, lo engendraron y dieron vida.

Anónimo dijo...

Ni sumisa, ni callada...y mucho menos indecisa!!!!!!!!!!!!!!!
Si tanto te gustan las mujeres calladas y sumisas, regresa al siglo III antes de Cristo.

A parte, por lo que he visto, el sumiso eres tú.

Besos a todos!